La creciente revalorización del patrimonio edificado de carácter local juntamente con la realización de proyectos y reformas urbanísticas de los centros y edificios históricos, han creado una necesidad de estudio y tratamiento de este patrimonio popular que cada vez escasea más.
Se ha empezado así, una dinámica de documentación y registro arquitectónico siguiendo criterios históricos y metodología arquitectónica que llegará a ser, en un futuro, una práctica habitual de qualquier actuación en el patrimonio edificado.
En algunos casos se quiere obtener un conocimiento profundo del conjunto, de cara a posteriores rehabilitaciones, y en otras, el poder disponer de una documentación y estudio del conjunto que no puede ser recuperado o tiene que ser muy transformado.